Año nuevo

Silencios interminables hemos sembrado
con la lobreguez de nuestras sombras
y cenizas de los fuegos que quedaron.

Cubrí bien con la sal todas las memorias
y cerré sin retorno los caminos enfangados
para que mi futuro no saque las copias.

Que en el ruinoso atrás no quede clavado
y nos despierte este 2024 con las rosas
de una vida, un universo nuevo sin pasados.

El 2024, fuente de aguas nuevas que brotan
rosas renacidas, nuevos deseos y postulados
sin las manchas, ni ideas torcidas de antaño.

Porque todo lo de atrás ha quedado cancelado.