Nueve

Cada noche que me marcho,
siento que dejo un pedazo
de mi vida de un plumazo
en el sinuoso camino,
que me pierdo a la luz de un hacho.
Cada noche
que me marcho,
antes que el sol se despierte,
por una calle desierta,
con mi andar maltrecho
un sueño se da a la fuga,
un deseo no se convierte.

Te dejo sola ,
sola con la madrugada y su aire frío,
sola con tus extraños sueños,
y me escondo,
en la cara oculta de la luna
como un bandido impío,
de un perdido,
paraje sureño.

En una oscura parada,
la madrugada parece infinita
pienso que será de aquellos
que no tienen morada.

Subo a un ómnibus ,
que parece vacío
me quedo dormido,
enroscado en un asiento,
sobrevivo al inmenso frío.

Etéreas figuras comienzan a aparecer,
a mi lado una joven y bella mujer
pero pálida como la nieve,
con su halo blanco
me envuelve,
como la fría muerte
me envuelve.
Observo sus labios rojos,
su pelo rubio
que se enreda con el viento,
y sus ojos que tienen,
perversa mirada.
En sus manos huesudas,
una afilada daga
que sin ninguna compasión
nueve veces hunde en mi corazón,
y nueve veces
mi alma abandona mi cuerpo,
y nueve veces muero.

El empleado de los boletos
se me acerca,
su cara es un despintado
boceto de un rostro de Van Gogh,
me vende nueve pasajes
para nueve cuerpos
con el corazón destrozado
nueve cuerpos inertes
que vagan por el ómnibus
con el alma ausente.

Trato de gritar
avisar para que los pasajeros
se salven,
pero el silencio
y la mujer de blanco,
con su daga asesina,
ahogan mis palabras

Adonde nos llevan!!!!!
no quiero ir al cementerio
de las almas perdidas,
aun mi cuerpo tiene vida
aun mi corazón palpita!!!!!

El chófer conduce por una carretera
sin señales ni luces
poseído por el frenesí,
con una estruendosa risa
que me altera,
no tiene frenos,
acelera como jamás vi.

De pronto te veo llegar
vuelas por doquier
en tus manos una lámpara de luz,
atando a toda la oscuridad
dando calor a la helada noche,
apartando a las almas perdidas
devolviéndolas a sus cuerpos
dándole vida,
despertándolos del sueño,
devolviéndolas a su dueño.

Siento que tus labios,
se acercan a los míos,
murmuras palabras
que no logro entender.
Tus tibias manos
entran profundo en mi pecho,
le reintegran el alma,
dan vida a mi corazón.

Me despierto,
siento mi corazón acelerado,
a mi lado el chófer me dice
- señor el viaje llego a su fin.
Son nueve pesos,
el sueño,
se lo dejo gratis......jajaja....

Comentarios & Opiniones

El Duque De La Rosa Blanca

Un muy buen y lúgubre poema, felicidades.
Este escrito es también algo como un tipo de mezcla con diferentes ingredientes, grandioso.
Nuevo seguidor, espero nos leamos, saludos cordiales y bendiciones!!!

Critica: 
Beto Brom

¡Fuera de serie!
Un viaje con nombre y apellido.
Mis felicitaciones, poeta.
Shalom colega de la pluma

Critica: 
Ambukkazoo

Genial pesadilla...

Critica: 
L'enchanteresse Rouge

Una figura femenina fantasmal asesina y otra fémina salvadora, serán las dos caras de la misma dama dueña de sus noches?... jaja! saludos cordiales

Critica: 
Xio

Vaya caramba!!!Que bueno fue una terrible pesadilla, me tenías en suspenso todo el tiempo, genial narración mi querido cubano, que alegría verte por aquí, un abrazo fuerte de aquellos de la isla y recibe mi cariño sincero Michael, feliz tarde amigo.

Critica: 
Sole1956

Bello final...menos complicado que a medida que leía me imaginaba. Creí que te debatías entre dos querer. Menos mal que fue un sueño .
¡ Saludo Cordial!

Critica: 
La Dama Azul

Caballero, grata lectura la que comparte con vuestras letras.

Reciba cordiales saludos y lo mejor por venir éste 2024.

Critica: 

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