Memorias

Perdí el tacto
Al rozar tu piel con mis dedos
No sentí más que miedo
Al sentir tremendo impacto

Me permití seguir con el acto
Reflejado en tus ojos el pasajero
Recién desbordado del extranjero
Con un trozo de ilusión intacto

Aliviado de cumplir el pacto
De contemplarte el cuerpo entero
Antes del invierno venidero
Que sentimos ipso facto

Después de un amor compacto
Que viajaba en mensajes sinceros
Prolongando el cariño verdadero
Hasta cumplir el tiempo exacto

Vislumbré la vida en tu melena
Una luz intermitente que no apaga
Una boca que no juzga, unas manos que no amagan
Purificando mis átomos en tus caderas

Serás la luz en el túnel
Viajando en la oscuridad
Tú eras el miedo a la soledad
Una mano hacia la cumbre

Hoy te tornaste lo opuesto
Lo sueños por la borda, los “te amo” en un silencio
Durante años fuiste todo lo que pienso
Hoy sólo eres la tortura por la cual me sentencio.