nunca

poema de umbria

En dos pasos arrancaría el viento, helado y frío, cercano al mar. Azul y gris, lleno de espanto. Los peces mueren ahora ahogados.
Sus huesos ferreos vibran y tiemblan. Sostienen más que dolor y quejas.
Oye el chasquido, el dolor asoma.
Sin red ni cuerdas, ¿por que ahora lloras?
Sin risas ciegas, que al llanto mueren.
Saltad, reír, sentirse a solas.
Sin alma vuelas por donde asomas.
Concava es, tu boca boba.
-No se volar- le dijo al cielo.
-No se soñar- le dijo a quien.
Echo hacia atrás, aún es fuerte.
Mirar abajo es de valientes.