El tiempo de tu persona

Vivías de la incertidumbre del mañana
pensando que era el fruto de hoy.
Sabíamos que no podíamos controlar la discrepancia
entre tu soledad y la mía,
pues sólo estábamos de paso en la promiscua rutina
que los sueños nos construyeron.
Yo siento que tú estás aquí, distante por tu mirada
pero inquieta por mi infinito sabor a pasión.
Un beso en medio de la nada que describíamos
como el paisajeque nombraba nuestros sentidos.
Nadie más pudo mirárnos, el tiempo estaba perdido.
Logramos romper la ciencia sin fantasía, tragar la importuna
decadencia de un alma sin ritmo.