Como es que te amo

Cuantos poemas habrán sido leídos,
Y nunca escuchados?,
Uno lee, y la conciencia habla,
Cuantas palabras escritas
Con tinta ensangrentada
En un documento olvidado
Por el tiempo?

Tantos versos de amor
Y recuerdos de pasión
No expresados con el aliento
Que brota impaciente
De un cuerpo inerte

Será cierto que el universo
Es incierto?
Será nuestro encuentro
El último gesto
Que grabó un rostro amable?

Serán tus manos en las mías
La esperanza desesperada
Que se escapa y desgasta
La vista perdida
En el recuerdo de todas tus sonrisas?

Volverá el viento a mostrarme
El perfil de tu cabello?
Y volverá el tiempo a decirme
Que tu voz es como un destello
Que se extingue
Para llenarme una y otra vez
Del perfumado brillo
Que liberas cada vez que el sol sale?

Me permitirá tu alma
Acortar esta distancia
Para decirte que no estoy en este momento
Pero que estaré en cada colapso
De la energía que se presente con cada mirada
Que le entregues a la Luna?

Podré alguna vez más rendirme
Al sutil pero apasionado palpitar
De mi corazón que romperá mi pecho
Para extenderse al gran encuentro del amor
Que me regaló tu último beso?

Me será posible retener la imagen
de tu cuerpo
Mientras me rindo por haber intentado
Demasiado?
Penetrarán por última vez tus ojos
En los míos
Antes de ser obligado a jamás
Recordarte?
Tendré que de una vez por todas
Olvidar lo que significa
La palabra esperanza?

Todo tiene tanta similitud a nada
Que me mantengo presente
Ante mi propia ausencia,
A veces, cuando el sol sale,
Recuerdo lo que será mañana,
Cuando yo ya no exista,
Cuando se nos haya ido la vista,
Cuando vacíos estemos de una espera
Impaciente,
Cuando termine viéndote a través
Del cristal entintado de mi corazón,
Será el fraccionado momento
En que se escurra un latido
De mi pecho a mi mano,
Sera el instante
En que me encuentre incesante
De ver lo que nunca existió
Y que solo es un recuerdo,
El atardecer partirá mi cuello
Y dejará en pellejos
El aliento que dejó de convertirse
En palabras,
Ya tampoco me quedan símbolos
Ni de verte, ni de oírte ni de olerte,
Solo quedan los símbolos que dejaste
En mi piel y que con mi tacto saludo
Cada mañana,
Mientras tú, eligiendo más de tres veces
Mi nombre, me creas frente a ti,
Para decirte una vez más,
Como es que te amo.