La vida real

Inconmensurable es en desasosiego
el tormento en que me hallo,
si hubiera palabra para describirlo,
sería eufemismo
pues no creo que haya habido
explorador tan temerario
para surcar al recóndito sitio
en que se halle un paralelismo.

Lo que me dijo antaño un anciano,
yo jamás lo olvidaré,
él se vio sentado en la calle,
la vida le dio un revés;
desprovisto de todas sus pertenencias,
una pregunta se formuló:
si no las puedo reclamar,
¿sí fueron mías o fue ficción?

Ahora que lo sabés,
ahora que lo sabés,
ahora que lo sabés...

Que nuestra miseria que tenemos en común
haga de vértice
y mitigue las ganas de vomitar
tras giremos
como hélices,

como el tornado, que se acerca,
como el revólver, en la mesa;
mientras el alquitrán nos merma,
seamos presa de la sorpresa.

Cuando le dije, sorbiendo,
incauto, de mi blunt
"es así, tristemente
como funciona
la vida real",
el anciano, carcajeó
si bien ameno,
también percibí
un atisbo de molestia.

Me dijo "no hay que ser reduccionista;
yo me creí hasta la última mentira
que me contaron
las radios y las revistas.
Lo que me ha despojado
de hasta mi último bien material,
¡no era la vida real,
era el capitalismo!".

Si pudiera apelar a tu indulgencia
por unos instantes,
me gustaría poder transfigurar
esta obra cuanto antes;
transformar este poema,
y convertirlo en una payada,
pues, me hallo sin trabajo
y con mi mujer embarazada.

Quiero poder mirarte fijamente
y ser capaz de confesar
todas aquellas cosas que a lo largo
de mi vida hice mal
pero, ¿qué voy a hacer con las gotas
que me brotan de sudor
por la infamia, la vergüenza, el cinismo,
el llanto y el pudor?

Lo que me ha desprovisto
de la capacidad
de alimentar a mi bebé,
espero que puedas ver,
¡no es la vida real,
es el capitalismo!

La distopia en que vivimos
hará las veces de espiral
y caeremos a lo más bajo
con tal de poder lograr
llenar hasta el último plato.

El sistema te ha fallado
y en el mismo proceso
te ha podido convencer
que así funciona la vida,
sin saber que, ya al comienzo
tenías las de perder.

Lo que pase desde el vamos,
lo que nos logren hacer;
los arados que estiremos,
lo que nos siga pasando
será lo que permitamos.

Ahora que el sol ha quemado tus ojos
y el único color que ves es el rojo,
¿vas a hacer algo para templar tu cabeza
o vas a estatuarte y ver cómo crece la maleza?

Ahora que lo sabés,
¿qué vas a hacer?
Ahora que lo sabés,
¿qué vas a hacer?
Ahora que lo sabés...

Inexpugnable es el lamento
de la culpa que yo siento.