No seas la opción de nadie

No seas la opción de nadie,
una opción b,c,d...z;
no esperes como mendiga
el amor que alguien no te quiere dar,
y no está resuelto a dar.
Sigue adelante, estoy segura
que en algún lugar alguien muere por alguien como tú,
alguien reza por alguien como tú,
alguien sueña
por alguien como.
Suelta ya ese viejo amor
que como fruto caído de un árbol
se pudre entre tus manos;
cómo recuerdo que se añeja,
huele mal y ahora pierde todo sentido.
Recibe un nuevo amor,
expande tus manos como gaviota
y recíbelo, pero recíbelo volando,
recibirlo soñando entre las nubes,
flotando entre las muchas posibilidades que te da Dios y el universo.

Sí, mereces ser amada, deseada y cuidada como la cosa más bella, mereces vivir una historia de amor con final feliz y no con tantos escenarios inconclusos.
Mereces cerrar los ojos
al lado de un hombre que te ame
y abrirlos nuevamente gozosa
para verlo de nuevo.
Mereces un amor correspondido,
un amor con un amigo
que quiere ser tu novio
y una vez es tu novio
desea ser tu esposo.
Mereces estar con alguien
que sepa lo que quiere,
y que defina que eso que quiere
eres tú.
Mereces un amor de ensueño
que te haga volar,
que te haga flotar entre las nubes.
Mereces un amor que dure un rato,
y ese rato que dure la vida entera,
y no un rato que dura la vida entera,
perdiendo tu vida, tu juventud y tu autoestima,
al lado de un hombre que no te ama.