Ubicua época

Sueñan los árboles con el respecto
Y buscan en las Antípodas
la recompensa.
Sueñan los viejos con la memoria
en la intriga de la obsolescencia programada
Sueña el mar con hacerse de oro
y que el verano lo compadezca
Sueñan los besos con la sal
y los cuerpos desnudos
con el agua
Sueña el viento con ser de hierro
y sueña el hierro con no ser metal
Sueña el noble sin esclavo
y sueña el esclavo sin nobleza
Sueñan los jílgaros con el cambio de estilo
Y sueñan los gatos con saber cocinar
Sueñan los héroes con la humanización de la guerra
Y sueña la guerra con estancarse en la historia
Sueña la historia con reinventarse
Sueña el rancio con ser joven, otra vez
Sueña la fecundidad con estirpar al estéril
Y sueña la esterilidad con hacerse de plata
Sueña la plata con hacerse de oro
y sueña el oro con ser una piedra más
Sueña la transición con establecerse
y sueña el sino con dejar de correr
Algún día
En una nueva y ubicua época
En la que todos
Dejan de soñar.