EMIGRANTE

poema de Gustafa

EMIGRANTE

Cuando la tarde se vuelva horizonte
y se consuman en su hoguera roja
todos los seres de esta tierra,
entraré al camino luminoso,
“torbellino incandescente”,
que llega hasta el final del mar,
a otro tiempo, a otra tierra.

¡Adiós ciudad de hierro y de piedra!
¡Adiós rincones de bohemia y desmonte!;
no te digo esto porque te quiera,
te lo digo porque...¡como cuerda vibrante!,
¡como brillante fogata que se apaga!,
quiero que escuches un instante
el eco de mis pasos que se alarga...