CRIATURA SILVESTRE

poema de Gustafa

CRIATURA SILVESTRE

Llegaste a mi puerta, vida mía,
entraste en mi vida sin llamar,
la llenaste de tu calor, de tu alegría
y me diste motivos para amar.

Los años pasaron suavemente,
se llenó de pimpollos el rosal,
que eras mía, mía por siempre,
que era tuyo hasta el final.

Pero un día llegó con el viento
el llamado de la selva sombría,
pude ver tu estremecimiento
y como poco a poco te perdía.

Criatura silvestre del camino,
se quebró el encanto cual cristal,
no pude escapar a mi destino,
hay solo espinas en el rosal.

Contigo la vida fue diferente,
delicada como flores de azahar ;
tú enfermera, yo convaleciente,
fuiste la perfecta dueña del hogar.

En ti prendieron mis simientes,
crecieron rosales junto al rosal
y de a pocos nos volvimos indiferentes...
nada, no hubo nada fuera de lo normal.

Cruce de especies diferentes,
nos despedimos después de anidar
y una bandada de plumajes celestes
emigra por las orillas del mar.

Llegaste en la tarde de mis días,
criatura insegura y amiga leal ;
compañeros, unimos nuestras vidas,
¡que verdes eran las hojas del rosal !.