Ave y humano.

poema de Eduardo Gomez

Harto de la miseria seguí el camino del viento,
me entregué a su pasión,
ave al fin liberada,
de la más pestilente y aterradora prisión,
atadora de almas, interminable victima del tedio.
Me entregue al enorme sentimiento de volar,
pues, el terreno de la tierra es sucio,
mis alas se desgarraban,
mis sentidos se llenaron de hastío
al volar bajo por la superficie.
Ahora vuelo alto,
me elevo más allá de lo visible.
Por la mañana,
mi ser se convierte uno con el alba,
por la noche,
las estrellas se vuelven parte,
la luna es mi consejera y guía,
forma parte de mí y yo de ella,
contemplo su brillo, somos uno.
Ahora vuelo alto, perdí la importancia,
banal y destructiva,
y si algo me causa dolor,
estoy tranquilo, la luna me acompaña,
caemos juntos.

Comentarios & Opiniones

Lorena Rioseco Palacios

Bellas metáforas, me encanto,todas las estrellas!!

Critica: 
Eduardo Gomez

Gracias por el tiempo de leerme y las palabras.Un abrazo.

Critica: