Los valores que inculcaste

En la vida no hay descanso,
la consciencia nunca duerme,
pues siendo un soldado raso,
por el plano en el que aprende,
sobretodo es el fracaso la que tu existencia expande en cuerpo y mente,
ya verás que acaba todo en un instante.

Vas de dopamina escaso,
ni siquiera tú lo entiendes,
vas buscándole un aplazo a los problemas del presente,
todo por no preocuparte,
lo esquivas cruzando el puente,
tienes miedo a hacerle frente,
compra huevos para echarle.

Como un niño impertinente,
a ver si aprendo a controlarme,
sintiendo contraproducente,
por culpa de alguien enfadarse,
el aprender a ser paciente,
dejar de hablar para escucharte,
con más frecuencia agradecerte,
los valores que me inculcaste.