Tere

Nunca pensé que una fruta
Me hiciese conocer a una bella
compañera de ruta.

Hoy nuestra amistad destella.
Fueron un par de caquis
Los que me acercaron
A esta preciosidad
De la tierra de los maquis.

Su tacto y bondad calaron
En mi corazón un poco abatido
Doy gracias por haberte conocido

Me alegras cuando el día
Empieza en nuestro viaje de ida
Con una ternura poco por mi conocida

Rematas del mismo modo
Cuando el día toca a su fin
Sin estar codo con codo
nuestro viaje de vuelta.

No llevamos ni maleta ni maletín
Ni la vida resuelta.
Te confíe mis males
Y me callaste diciendo " tu si que vales"

Sigues inclinada en el asiento
Tu melena cobriza
Parece que se se eterniza
Sin mecerse por el viento.

Llevas el móvil pegado a la oreja
Y tu voz alta puede que haga fruncir
A algún amargado la ceja.

Yo pienso que tú lo que haces
No es más que lucir

Qué en mi solo traces
Un motivo para seguir escribiendo
Pues vas mi poema leyendo
Y al terminarlo me dices que es precioso

Me dejas mudo en mi dicha
Y únicamente muevo ficha
Para decirte muchas gracias

Fue también un momento hermoso
Cuando las caricias
de todas tus atentas palabras.
Diciéndome que la esquizofrenia es una opción
Despejaron esa perdición
que me tenía preso.

En este mundo perverso.
Mi querida amiga Tere
No me preocupa que se entere
Quien pueda hacerme daño

Pues año tras año
Me voy queriendo más
Y dejando la incomprensión atrás
Mientras espero conocer gente como tú
Sin rogarselo al Dios Manitu.

Pido que toda la lluvia
Sea tan enriquecedora
Cómo fue esa hora
Que me trajo tu amistad
Para la esperada eternidad.