Ataraxia

poema de Alexander M.

Nimio deseo galopante en el rosal de tus ojos
Libido deseo corre por mi sangre con desalojo
Me rindo a la alquimia de tu mirar, de tu sentir
Me vuelvo ebrio de tu amor, me vuelvo a vivir.

Más, cuando te veo
Me doy cuenta de todo
Y sin importar el lugar
Se detiene el tiempo
Aún este sin existir,
Se desea pecado
Con tu mirar.

En la vida no hay más
Que tu dulce ambrosía
Hiel de mi caminar
Ser de mi existir.

Le da sentido al tiempo aunque este detenga
Le da sentido al pesar aunque no lo obtenga
Soy sólo mártir de mi latir pero ante tu gravedad
Erro, soberbio que te detengas en mi soledad.

Describo, cometo y acumulo los pecados
Por ti me hundiría en el lodo nuevamente,
Caería nuevamente al abismo del que tanto huyo.
El pesar sería más fuerte, nihil si no peco
Por la pérdida de tu abismo, de tu corazón
Que como ángel se le prohibió la duda
Y yo, mortal que duda hasta de la luna.