UN SEGUNDO
poema de Alma verde
Arrástrame soledad a los brazos de ese hombre,
quiero sentir la calidez de su cuerpo.
Llévame soledad muy cerquita de él,
quiero sentir su respiración sobre mi piel.
Déjame ahí, justo a un paso de sus labios,
déjame sentir la tentación, que no hace daño.
No me quites este momento soledad,
en que puedo estar junto a él,
será un segundo solamente, lo prometo,
un segundo en que solo seré para él.
Para mí será suficiente para nunca
olvidar su querer y luego regreso a ti
soledad, aunque quiera estar con él.
Comentarios & Opiniones
Con un saludo nuevo. Profundas y sinceras palabras, lo que sale del arcano, de lo prohibido. A veces los varones deseamos escuchar lo inverso. Pero el que vive, viaja y aprende, sabe. Felicidad y, hasta pronto.