ES HORA!

No es angustia.
No es rabia contenida.
Son palabras guardadas dentro
las que rasguñan sin piedad el pecho.

Por no hacer daño... callar.
Por evitar confrontaciones... callar.
Por mantener la paz...callar.
Por no agitar mares bravíos... callar.

Silenciar no es otorgar ni dar razones a equívocos.
Muchas veces es sanidad del alma.
Cuesta mucho el equilibrio
como para saltar al abismo porque sí.

Hay una revolución en la mente.
En este tiempo en que parece todo dormido,
que pasaría casi desapercibido...
hay tanta rebelión silente!

El portal cósmico se abrió.
Alguien puede dudarlo?
Si hasta el cielo grita "es hora"!
Si hasta los sueños hablan de cambios!

Ojos abiertos sin ver.
Mentes cerradas sin oír.
Cuerpos anestesiados sin protestar.
Pero existimos también de los otros!

Acaso tu lucecita interior no te habla?
Esa chispa divina que cargamos, no te guía?
A mí si!
Se abre paso en mi alma y sale a batallar.

Me enseña a escuchar con mis instintos.
A observar qué está pasando...
A entender que algo enorme va creciendo
y que lo que esperábamos será el cambio.

Es tu llegada, Señor.
Surgirás en los corazones dormidos.
Y quienes no quieren verte, no serán salvos.
No serán iluminados!

Siempre me he preguntado porqué no te sienten.
Si estás en todos lados!
En la flor hermosa y fragante
después del invierno más yermo y largo.

Estás en la brisa temprana
que quita fiebres y seca llantos.
En la alegría más libre
desde el canto de los pájaros!

Y estás hoy en mis letras
que salen a buscar veranos
como esas golondrinas azules
corren mis ríos lejanos!

30 de julio de 2021

Comentarios & Opiniones

Fander

"Son palabras guardadas dentro las que rasguñan sin piedad el pecho." hermosa ilustración y poema, tiene muchos "toques" y reflexiones, como: callar, algo muy humano, pero a veces malinterpretado, saludos a la distancia

Critica: 
Corazón de flores

Es cierto, Fander. Callamos para evitar bataholas. Más hoy día que la gente está sumamente susceptible y frágil. A diario callamos. Gracias por pasar. Saludos y buen finde.

Critica: