A don Ramón del Valle-Inclán

poema de El Caminante

Más que un Vulcano, tu yunque ensordecía,
y mejor, dando cuerpo a tus palabras;
infatigable fantástico, bohemia y melodía,
cautivaste en mí un sentido que proclama:

¡Canto y coro a don Ramón, galaico señorío,
hiedra y laurel y llanto bajo tus barbas canas,
petrificada tu alma en un jardín umbrío,
descifrando el lento murmurar de la fontana!

Así baste para ahuyentar, tullido Ulises,
el dulce canto de sirena del Olvido,
¡moderno heraclitano, campiña de oro y lises,
donde ronda el ilustre Bradomín meditativo!

Porque hubo luz de Apolo, vívida en mis libros,
tules de ondinas sobre tu historia aborrascada,
¡recemos un réquiem de pazo enfermizo,
corazón de fuego, y sombra de guadaña!

Y a brindar, señores, nada esté escrito...
¡acaso algo diga la rubia champaña!

Comentarios & Opiniones

Yan

Un placer leerte Caminante. Saludos.

Critica: 
Lorena Rioseco Palacios

Simplemente notable querida poetisa, mares de estrellas , seguiré leyéndote y un cálido abrazo!!!

Critica: