Ese día

poema de val

Ese día me desperté con miedo, miedo a perderte, a perdernos, a que un día ya no regresaras nunca más a mi, de que me olvides y dejes de valorar todo lo que fuimos y tuvimos juntos. Te observé en la penumbra, dormitabas en perfecto silencio. La lluvia me acompañaba, me decía a gritos lo que necesitaba escuchar con golpes en la ventana. El sol no iba a salir ese día, y la luna se mantenía al margen, divisando todo desde lo más alto. Miré con cautela hacia afuera, las luces estaban apagadas en toda la ciudad, el cielo estaba despejado y volví mi atención a ti.
No confiaba en que esto fuera del todo real, que estuvieses durmiendo a mi lado, una vez más que quizá, podría ser la última. Una lágrima rodó por mi mejilla y cuando me percaté era tarde, mil más mojaban mi rostro. No era consciente de lo peligroso que se había vuelto todo, ver a una persona a escondidas porque tiene a alguien más, y sabiendo, que mi corazón sería el más perjudicado. Lo volví a mirar, continuaba en sueños. La noche perfecta jamás había sido contemplada, hasta ahora. Era lo que teníamos, algo por la noche, a oscuras y solos, sin que nadie más viera. El reloj daba las 10, era hora de irme. Sequé mis lágrimas para que no supieras nada y me fui, el beso no sabia a despedida, sino a tal vez, en otro momento, vuelva a ser