En el autobús
poema de Trinidad Catalan
La anciana camina a pasitos
que recorren algo más que metros o centímetro
recorren un universo basto, caído del cielo,
no más.
El autobús se ha parado, harto de vino
o debido a horarios mal paridos,
Pasen al autobús de adelante, se anuncia
y la anciana
advierte, yo voy lenta. Lenta
como una parra milenaria, como una montaña
sin lagunas.
Ni los cometas me alcanzan
y la ardilla se distrae entre mi ramaje.
El autobús espera porque es amigo,
la conductora espera porque
es compañera y entendida
y un adolescente encapuchado, viandante
se ha parado, ha cogido las bolsas de la anciana
que a paso lento elimina fronteras,
edades, consejos, y criterios,
y se dan las gracias.
Comentarios & Opiniones
Soledad: Interesante tema. Lo urbano y el "Ser" trasegando con sus vivencias a cuestas.
Linda muestra de solidaridad es tu obra; los años y sus limitaciones y ese agradecido gesto de ayuda y entrega; que belleza, abrazos sinceros, feliz noche.