La mujer sin ojos

poema de Simona Costa

Tras la niebla no había nada
para nuestro desespero, allí tan solas.
En el desierto jamás hallarás a quienes te esperan.
Entonces, la mujer sin ojos me preguntó:
¿Y dónde crees que se encuentran quienes te esperan?
La mujer sin ojos me ha lanzado las miradas más hondas,
ha abierto en mi piel heridas que nunca van a sanar;
me ha dotado de una sabiduría que rechazo, un vértigo que no asumo.
Las miradas de la mujer sin ojos...
lo turbio en una calle de noche, lo que se enreda en la niebla,
erra el camino, se inventa un crucigrama en tu cabeza
para que te vuelvas loca, equivoca las distancias
y acerca los precipicios al jardín de casa.
Las miradas de los ojos que no ves, esa mujer que adivinas...
te hacen más sabia al tiempo que te condenan. Sin ojos.
Sin ojos no es necesario comprender el infierno.

Joanna Dufromont.

Comentarios & Opiniones

Joelfortunato

Joanna: Un gusto leer sus buenas y especiales letras. Encuentro una especie de simbolismo ocular de interesante significado intratextual. Le envío saludos y amistad.

Critica: 
Simona Costa

Gracias, muy amable Joelfortunato.

Critica: