Calor
poema de San Brendano
El calor inunda nuestras almas
En fogata ardiente
El velo de las sombras
Alma mia, que nunca muere
Alma solitaria que jamás cede
Adónde vaya Afrodita, los pueblos rezan
Desnudos los halitos
Él, florece
Y mí no mundo de belleza recóndita se revela
Porqué el calor todo lo puede
Desnudo bien
Desnuda bien
Son nuestros hijos
Hijastros de una sociedad enferma y vacilante
De un Dios supremo que alza su cabeza
De una mujer anciana que da a luz, un hijo ciego...
Comentarios & Opiniones
Siempre impactante en ese decir tan peculiar, único, creativo, mis cariños Silvestre, deseo toda la familia esté bien, feliz noche chica.
Maravilloso escrito
Gracias, saludos