ASTEROIDE

Nos encontramos, bien.
Exacta posición de los astros.
Soy el asteroide atraído por la gravedad
de tu cuerpo herido.
Vengo a la velocidad de los
cuerpos que se expanden y
exigen su territorio para poseer.
Mi materia es esencial.
Mi núcleo está ansioso del calor
que habita tus entrañas.
En amalgama de ansias me
alimento de tu cuerpo y de deshago en
cada hilo de tu saliva, en cada gota que
llora de placer tu sexo, en cada ondulación de tus
caderas, en cada respuesta a mi vocabulario
desenfrenado.
Me desharé al penetrar tu atmósfera.
Y repetiré mi sideral suicidio
Tantas veces como me lo pidas.
Da nombre a este asteroide perdido.
Abre tu cuerpo al viajero que te busca.
Me fundo en ti.