AMOR EN FUGA

poema de Susodicho

AMOR EN FUGA

Apresuro el paso tras el tuyo
con imperioso afán
de acompañarte
a la par, si te alcanzara
sin hallar sosiegos.

Te adivino
a la vuelta de una ochava
en cada esquina,
por sobre las cabezas
de la muchedumbre
que nada me revela
de una sola pista
que me indique
el rumbo de tus andanzas.
Como tampoco
el mínimo esbozo
que anticipe tu rostro

Es una penuria mi derrotero,
por momentos excitante
cuando percibo un dulce aroma
y lo presumo conocido,
con instinto de animal
que huele, cercanos,
los efluvios de una hembra en celo

De un felino adopto
aguzar el oído y abrir los ojos
al máximo de sus órbitas
para avistarte,
paloma de las cornisas,
ave de campanarios
por donde intuyo que sobrevuelas

“Un pájaro sin jaula quiero ser”
Dijiste un día con ingenuidad
que confundí con mero antojo
de tus fantasías.
Pero pronto comprobé
la audacia de tus alas,
viéndote salir a prisa,
en rauda fuga
surcando el aire.

Vientos a favor te ayudan
a ganar distancias
en tu ingrata huida.
Vientos en contra son los míos,
opuestos a mi empuje,
cansado como voy
sobre un suelo sin alturas
colmado de tropiezos,
por donde trastabillo
torpe y repetidamente,
escaso de cordura.

Te pienso un águila de las cumbres
por tus garras que me hirieron;
un cisne de las lagunas,
por tu canto que me sedujo;
una luciérnaga,
por el hechizo que me atrajera
hacia la orilla de tu fronda
codiciada

Después mi ceguera
y desde entonces,
a tientas y por olfato,
persigo tu rastro
Mi próxima meta, el ocaso,
allá en la boca crepuscular,
con su horizonte que alarga
comisuras como de labios,
que parecen reír
de mi tesón para alcanzarte.
Tal vez lo harías tú,
burlarte digo,
si esperándome volvieras tu rostro
para mirarme, atrás,
siguiéndote,
y supieras que lo haría
hasta dar con el abismo
en donde juntos
pudiéramos caer,
finalmente acompañados.

-.-

Rene Bacco