El nudo de un ángel

Un ángel te mira durmiendo,
te mira en silencio... y se acerca.
Pasa su mano por tu corazón
y se le llenan los ojos de lágrimas,
le duele que yo te duela,
le duele que estés angustiada.
Siente piedad por tu luz más sincera
y sabe que tus ojos se han humedecido de dolor.
Mira al cielo y se arrodilla a tu lado,
reza para ahogar ese llanto que ha inundado tu pieza
y de sus cabellos dorados saca una cinta plateada
la cual bendice y sobre tu alma deja,
para que no se desarme tu corazón,
para atar una esperanza, una ilusión,
de que si una cosa termina otra empieza.