Pesadilla de hormigón

Un tenue cansancio tira de mis párpados y de mis esperanzas

regando con una fina lluvia cada uno de mis pensamientos

reverberando el gélido vacío que me forma y me da forma

paso a paso como un puzzle me desmonta

y no me desagrada, desnudo ante mi mismo

solo de mi propio zapato soy horma

cada vez mas desprotegido y mas desamparado

vagabundo que de madrugada en madrugada salta

sin recuerdos de ningun ayer, sin esperanzas de ningún mañana

que de pies y pensamientos cansados de el mismo huye

escapando por su propia pesadilla de hormigón y acero

con los pies llenos de heridas en el suelo

mientras sueña con días de calor y terciopelo