El descanso del poeta.

Aveces, el poeta…
necesita un descanso,
para reciclar dolor
renovar rosas
y empapar el llanto.

Buscar un amanecer
y pasear pensando
que hubo un antes y después…
de su primer borrón
de su último canto.

Llenar su tintero
adiestrar su mano,
y mirar en su corazón
por si aún queda alguna razón…
para seguir contando.

Descansar la memoria
en cualquier banco,
y mirar al cielo
entre las ramas de un árbol,
y así, cuando esté preparado…
volver a encadenar versos
enlazar rimas
desgranar su encanto.

Y, contar con letras…
subrayando y tachando
lo que ven sus ojos
lo que siente su tacto,
y abrir su alma
para que entren soñando...
todos los sentimientos
que puede sentir el ser humano.

Hablar de la vida
resumiendo espacio
para cuando lleguen a tus manos
los leas entusiasmado
y reflejarte en ellos
como si fueses tú...
el que lo está narrando.

Aveces, el poeta...
necesita un descanso.

Téura