No estoy cortada con la misma tijera

No estoy cortada con la misma tijera,
intenté hasta lo imposible para que nada te doliera,
y lo único que logras es que por dentro muera.

Cambiaste hasta tu forma de besarme,
la intimidad se volvió favor,
antes era magia ante tus ojos desnudarme,
ahora solo siento pudor,
porque demostraste que mi cuerpo
no es de tu infinita atracción
aunque digas que no.

No estoy cortada con la misma tijera,
aún con la sangre desbordando me alimenta tu presencia,
y quién pudiera seguir amaneciendo a tu lado después de tanta mierda,
sin buscar refugio en terceros cualquieras,
cómo acostumbras encontrar en mi ausencia.

No salpiques lo podrido de tus actos,
solo por no saber afrontarlo,
si así fuera no llevarían tu nombre mis llantos.

No estoy cortada con la misma tijera,
perdoné lo que era un adiós para siempre,
tu seguridad de saber tenerme no te hace de eso conciente,
y buscas mi infidelidad a costa de imaginación,
cuando tus evidentes acciones no tienen justificación.

Y siempre soy yo,
la que queda con la angustia de el maltrato que encadenó mi dolor,
no analizas ni te importa
que quien te ama no te traiciona,
y a quién juras amar cambias por otra cosa.

Solo por un momento deja el egoísmo,
solta lo poco que te hace unirnos,
y deja que liberemos nuestra historia para no destruirnos,
porque no estoy cortada con la misma tijera...

tus tantos puñales no cicatrizan pero eso esperan,
no hay voluntad en tu conciencia,
más que ser independiente como si soltero estuvieras.

No sincronizamos las etapas,
con tus sucias jugadas mis proyectos no avanzan,
y que tristeza admitir que no vas a ser vos el compañero para aquella ocasión.

Y que tristeza asumir que fui pasajera para tu corazón.

De tantos detalles que me hicieron sentirte el indicado,
solo queda saber que por tu deseo de alguien más me estás engañando.

Algún día vas a darte cuenta que quién más tiene nada tiene,
que no hace falta variedad,
ya va a llegar el momento que no te encanten por el cuerpo,
sino por la honestidad.

Ya va a llegar el momento que no te importe solo el sexo y te llene el complemento de la confianza y los preciosos recuerdos.

Ya va a llegar el momento que no te dejes cortar por la tijera de la hombría y que valores la importancia de provocarle a una pareja tranquilidad y armonía.