Te quiero...
poema de M.M
Mi te quiero sabe de alegrías que tallan sonrisas
En las cumbres de las mañanas, con tú te quiero.
Que también sabe de dolores que desarman
En los abismos de las noches, con tu partida.
Mi te quiero no conoce excepciones ni excusas,
porque incluso cuando nos cortamos sin piedad
con el filo de las palabras más viles de ocasión,
el te quiero se niega a partir, es nuestro hogar.
Mi te quiero, ni más ni menos que aquel te quiero,
es mío, es tuyo, es nuestro, y es eterno,
y aún cuando nos sobren esos silencios finales,
Mi te quiero te estará queriendo a gritos.