Hora Inesperada
poema de Mae Nameky
Y en una hora inesperada, te miro.
Te descubrís de otra manera.
Me dejas.
Te reconozco sin palabras.
Solo los colores y sabores, sin la excusa,
que camufla tu piel.
Soy la víbora,
no por que me arrastre,
sino porque quiero parecerme
al pecado en esta historia.
Me dejas.
Vuelvo a sentir, sin romances, mi debilidad por tu lujuria.
Nada, te miro. Tu pelo recogido en tu labor.
Otra vez tu miedo, después soltas,
y otra vez tu belleza se adueña de las horas.
Me dejas.
Me duermo con tu voz que me dicta una ficción tan débil,
que todos creen que es real,
hasta que me rio fuerte,
despertando al sol,
de este nuevo día
Comentarios & Opiniones
Envidiables líneas Mae Nameky. Saludos!
"sino porque quiero parecerme
al pecado en esta historia."
"y otra vez tu belleza se adueña de las horas."
a veces soñamos con los ojos abiertos; lindas palabras!!
maravilloso, "Vuelvo a sentir, sin romances, mi debilidad por tu lujuria" toda una condena deliciosa. te felicito
Nada, te miro. Tu pelo recogido en tu labor.
Otra vez tu miedo, después soltas,
y otra vez tu belleza se adueña de las horas.
Fantastica manera de decircelo!!!! Hermoso poema!!!