Mi mundo de locos

En la nada, todo es mejor...
No hay dilemas, no hay dolor, no hay sangre...
No hay nada.
En el vacío puedo llorar sin ser escuchado.
En el vacío los ecos de mi llanto, lo gritos de mis desgarres, no son criticados.
Cayendo, todo se termina, el sufrimiento, termina...
¿Por qué no permitirme saltar, al abismo de la muerte?
Al fin y al cabo, no me han de recordar, y mucho menos, de extrañar...
¿Por qué privarme de clavarme aquella daga, de dispararme aquella bala, de ahorcarme con aquella soga, de intoxicarme con aquella droga?
¿A quién le importa, lo que yo decida?
¿A quién le importa lo que haga de mi vida?
Soy como un ave vagando por los cielos, sin encontrar un nido.
¿Por qué no permitirme reconstruir mi nido, en otro mundo, a mi manera?
Soy como un elefante sin su manada
¿Por qué no permitirme volver a crear mi propia manada, mi manada de uno?
¿Y qué, si la soledad es mi única amiga?
¿Y qué, si la locura es mi único aliento?
¿Y qué, si el alcohol es mi única fe?
Me entrego a las mil y un promesas, que alguna vez escuché.
Las mil y un promesas, de que alguna vez resucitaré.
De que alguna vez mejoraré.
De que en algún momento, algo valdré.
¿Y qué obtengo, dejándome fluir en sus brazos, en sus letras?
Nada...
¿Entonces por qué no dejarme seguir el camino que he elegido?
El del caer en las ramas del olvido...
¿Por qué obligarme a ser "gente civilizada", si la gente civilizada miente sobre cada cosa de la que habla?
Se hacen llamar "humanos", y destrozan el planeta.
Se hacen llamar "grandes", y solo siguen un mundo rutinario.
Se hacen llamar "de palabra", y solo piensan en su beneficio.
Se hacen llamar "de honor", y solo copian lo que el mundo anterior ha hecho, solo entran en la vida que sigue al itinerario.
Su mundo, no es más que un hoyo negro.
Sus vidas no son más que miserables, grises.
Ellos mismos son grises.
Y como yo veo al mundo, ¿es como no hay que verlo?
El color multicolor que busco, ¿es la locura?
¿Por qué no otorgarme la razón, o al menos considerar que puedo tenerla?
¿Por qué no acceder a pasar un solo día en mi tierra?
Sé que me temen, como le temen a todo lo que no hace parte de ellos.
Sé que le temen a dejar su vida en manos del azar y la sorpresa.
Sé que le temen a no dejar que el miedo, la pena, los prive de la vida.
Sé que le temen a todo.
Y yo aquí, solo en mi mundo, ¿debo aguantarme sus quejas, reclamos, críticas , consejos ignorantes?
No quiero obligar nada a nadie, pero pido que no me llamen loco.
Pido que me dejen en mi sol de colores y diversión.
En mi mundo fuera de la civilización.
Pido que me permitan pasar el ciclo de mi vida en paz, en mi bola de cristal, y que no la critiquen, sin al menos atreverse a entrar.