La mariposa

Pintaba estaba sobre el paisaje.
De alas moradas mezcladas de tonos dorados y oscuros.
Hermosa, pura, perfecta.
Pero a pesar de su grandeza y su majestuosa y delicada figura, parecía entristecida.
Como si algo le hiciera falta.
Y de pronto lo entendí, aquella mariposa estaba atrapada.
Atrapada entre pinturas, limitada a poder tan solo mostrar su belleza.
Posaba sobre una flor, inmóvil.
¡Pobre animalito!
Estaba acostumbrada a revolotear por los aires y dar piruetas mientras iba de flor en flor.
¡Y su libertad le había sido arrebatada!
Ahora solo su bella vestimenta modelaba.
¡Qué pesar me generaba!

Fue un día muy soleado, en el que fui a visitarla.
Y su hermosa figurita,
¡En la pintura ya no posaba!
Sino que entre aires y vientos libre volaba, flotaba, pirueteaba y reía.
A veces cansadita se reposaba sobre el cabello de alguna dama,
Haciendo de adorno.
O de corbatín en la vestimenta de los caballeros.
¡Cómo la admiraba!
Tan bella, tan libre, tan pura.
Soñaba con lograr escapar de mi propia pintura,
¡Para poder acompañarla en su vuelo!
Deseaba con ansias poder ser su compañera,
Contarle historias y escuchar las suyas.

Desde aquel momento, mis días se resumían en una pequeña visita a la bella criatura, que ahora consideraba como mi amiga.
La vi crecer, la vi volar en lo más alto de las nubes y cansarse.
La vi envejecer, envejecer a su manera.
Y un día, de manera inevitable, la vi desvanecerse.

¿Cómo será aquella vida?
Aquella vida que se resume en algunos días…
¿Cómo será volar libremente entre los pétalos de una flor y el follaje de un árbol?
¿Cómo será sentir que lo puedes todo,
Y a la vez no ser capaz de nada?
¿Ser tan hermosa y grandiosa, y al mismo tiempo frágil y pequeña?
¿Cómo será nacer mariposa?

Me lo pregunté cada noche, después de haberla visto elevarse,
Y caer rendida, para no levantarse.
La figura de su sombra volando frente al sol pasaba frente a mis ojos,
Y me hacía imaginar su vida.
Pero nunca encontré respuesta a mis dudas.
Y nunca la encontraré.
Pues es el misterio de la perfección.

¿Cómo será ser tan libre y a la vez tan prisionera del mundo?
Y, ¿seremos realmente mariposas atrapadas?