Cuando el docente pierde el interés, la llama apaga,
La educación se resiente, y la calidad se desplaza,
No es cuestión de disculpas, ni de palabras vanas,
Es compromiso y pasión lo que el aula demanda.

El estudiante espera con anhelo aprender,
Con maestro motivado, dispuesto a comprender,
Pero cuando el docente pierde su vocación,
La enseñanza se empobrece, falta inspiración.

No se trata de excusarse, de evadir la responsabilidad,
Sino de renovar el compromiso, con sinceridad,
Recuperar el entusiasmo por guiar y formar,
Para que el estudiantado pueda brillar.

La educación es un faro que ilumina el camino,
Y el docente es el guía, el faro divino,
Cuando se pierde el interés, se oscurece el sendero,
La calidad educativa se ve amenazada, eso es sincero.

Así que docentes, mantengamos viva la pasión,
Porque de nosotros depende la educación,
No fallemos a quienes confían en nuestro saber,
Cuando el docente pierde el interés, es el estudiante quien va a perecer.

Comentarios & Opiniones

La Dama Azul

Caballero, encuentro reflexivas y claras vuestras letras. Un gusto pasar.

Reciba cordiales saludos.

Critica: 
Sole1956

Me encanta tu poema.No es fácil ser un buen docente, más en la actualidad que los valores van cambiando y los jóvenes algo rebeldes. Gracias por compartir, compartiré tu poema con 1 nieta y 1 sobrina. Ambas docentes.
Saludo cordial!

Critica: