Muerte de una felina, felina muerte

Reseñas, amenazas -Un hueso roto-.
"El mío tampoco fue" dijo.

Procedí a observar como lentamente se descascaraban los rostros de los fantasmas que nos acosaban en ese instante, ella simplemente continuaba dando la pelea de su vida. Bueno, la tercera de su vida; de esta vida.

Era salvaje, indomable.
Tan arrogante y con tanto poderío como una felina,
hermosa ante la vista de cualquiera,
infernal bajo los que ya tuvimos su experiencia entre nuestros interiores.

Jamás podría describir exactamente como sus palabras han forjado un odio interior, un asco. Vergüenza al saber que he puesto un pie en su habitación de ronroneo.

¡Oh señorita belicosidad!
¿Me permite una noche?
"Después de usted".

La verdad detrás de todo, es que era un cigarrillo más:
Moriría luego de agotar su veneno flamante en mis pulmones.
Estancaría toda su belleza en una noche,
caería desde el piso más alto,
para formar parte de los que anteriormente, nos veían con miradas robustas.

"No hay manera de alejar el peligro, hasta la muerte le teme"

Pero en mi circunstancia social la muerte no es más que una tentación y el peligro un juego producido desde mi nacimiento.

Te alejaste,
después de muchas noches en las que creí haberte visto conmigo;
No era yo, eran los faunos que soñabas derretir en tu boca.

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Dedicación a/Historia de: A.M.V.