EL PIRATA DE AGUA DULCE

Ey! Que yo no soy pirata de agua dulce.
Navego en el mar de las estrellas cuando se apagan las luces de mi habitación,
reluce la constelación del cosmos que nos une
a millones de años luz por tu perfume.
Ando por las teclas de un piano, yo he llorado tanto
que he creado un nuevo océano, pero hoy ya no.
La vida me enseño unos cuantos trucos
corazones, picas, tréboles y rombos juegan siempre juntos.
Los reyes solo en los cuentos,
si tu príncipe azul es un marrón: lo siento.
Haber besado al sapo en vez de al guapo al fin y al cabo
a chispita del amor tan solo dura un par de años.... ay...
todo había sido un sueño, despiértate cariño, no te quedes ahí durmiendo
porque luego no querrás lo que tendrás que soportar cuando te toque estar despierto.
Uh! Debo de tener la sangre dulce,
se dice que a mosquitos y a vampiros les seduce,
con cruces en el pecho se reducen nuestras faltas,
yo pregunto que me ocurre si la llevo a mis espaldas.
Nada de lo que teníamos pensado hacer el día
en que la madurez borrase nuestra fantasía, nada...
nos podría hacer volar de nuevo,
si las aves de las plumas de mis alas... ya no ponen huevos.

Que yo soy un pirata que guarda el corazón en alta mar.
Lejos de los cantos de sirenas, lejos de todo...

Pero el polvo de las alas de las hadas en las salas de las almas desgastadas se me atasca,
yo que vivo en la borrasca tras la cascada del alma
yo que voy con calma cada día mi infancia se vuelve más larga,
nunca acaba de terminar del todo.
Agárrate, que puede que la inercia de mi corazón latiendo nos arrastre
y te lleve hasta un jardín de rosas rojas.
Donde un conejo blanco nos enseñe su reloj.
Habéis visto que tarde? Dejemos que se pire...
Quiero que sonrías como el gato de chesire...
es por eso, que a veces la realidad me confunde.
Es la misma tonteria con distinto perfume...
Tu me ofreciste la mano y yo te la tomé,
late mi corazón dispuesto para que no me conforme.
Ponme lo mejor del cofre donde guardes tus más íntimos secretos.
Soy pirata de los mares de lo suave de tus besos,
si tu supieras lo que es eso de ser preso de un carácter.
Vivir en los cráteres, todo lo que escribo me lo han dictado los ángeles.
Claro! Yo que siempre quise ser demonio,
hasta el moño de los sueños que se secan como las flores de otoño...
pido a campanilla matrimonio
hasta que muerte nos separe o se acabe este folio.