PEQUEÑAS COSAS

poema de Jair Segura

Te enamoras de las pequeñas cosas de alguien; las letras que desprenden sus ojos,
la música que entona su risa,
la poesía que habita en su cuerpo,
el néctar que se encuentra en sus labios,
la rosa que florece cuando separa las piernas, el agua que cae por sus cabellos,
el aroma que emana su piel, la calidez de su tacto,
lo inalcanzable de sus senos, y lo excitante de su cuello.

Te enamoras también de la tranquilidad que te ofrecen sus manos,
el amor que guardan sus caricias,
los sueños que vuelan sobre su cabeza,
la forma en la que dice que te ama sin decirlo, los misterios de su ombligo,
la comodidad de sus piernas,
lo complicado que se te hace pronunciar su nombre cuando te hace llegar al orgasmo.

A veces las pequeñas cosas
se sienten con más intensidad.