Mi mejor medicina

poema de Jalei

Su cabello largo
cayó sobre el colchón,
entrelazó sus piernas
con las mías,
y colocó mi mano
bajo su brazo;
le gustaba
sentir mi vida
al frente de su vida.

Al preguntarme:
¿Me quieres?,
tocaba mi nariz, diciendo:
“mentiroso”,
tras mi respuesta
certera;
se dormía, mis manos
dándole ternura
a sus pompas.

Le acariciaba despacio
tras suyo, su rostro,
su cuello;
acurrucándome
a su espalda.

Con unos cuantos toques
de mis labios en su frente,
en la esquina de su mejilla,
cual cerca tuviera;
decía: “eso tan solo me faltaba”,
“mi mejor medicina”.