Cuervo aledaño

Cuervo aledaño
libre como el suave viento
que recorre tus blandidas alas azabaches
con total independencia soluta
perseguida de costa a costa
para reinar a la deriva de su rústica morada;
¿de dónde vienes?

Por favor, no busques tus plumas acá,
esas que formaron partes orladas
de tu glamorosa efigie,
y por favor no te culpes por ello
ya que muchos se han levantado de forma serena
junto con la brisa que sosiega a las volubles hojas
que cantan en eternos bucles su canción fantasmal;
¿hacia dónde te diriges?

Me dijo: sé cómo todo esto comenzó
pero no sé cómo acabará
y realmente no me importa,
ya que estoy del otro lado del río
donde puedo ver a todos los elegidos descalzos
aguardando con impaciencia
por la lluvia que hablará con total brío por nosotros
¿has visto los ojos abiertos de la noche?

Cuánta herejía se ha levantado
desde que nos despertamos
del pensamiento y la memoria
para volar lejos por los senderos del tiempo
antes de que todo comience a terminar,
y por favor no te culpes por ello,
me dijo: sé cómo todo esto acabará
pero no sé cómo se gestará
y realmente no me importa
ya que mis pródigos cantares de réquiem
hablarán con fresco dulzor por la mañana
en el danzante vuelo etéreo
donde la custodia de la magna Morrigan
nos guiará hasta el desvelo
para desaparecer entre los velos de la mística niebla