No hace falta

poema de Sheldon

Ella llora,
mojada está su almohada,
a todas horas,
su habitación permanece inundada.

Busca ayuda entre la gente,
pero nadie la ayuda,
a nadie le importa,
que ella lo este pasando terriblemente.

Sale a la calle,
en busca de silencio,
que solo habita en ese cementerio ,
donde espera que nadie la halle.

Vuelve a casa,
allí sus lágrimas,
crean ese mar,
en el que todo recuerdo abrasa,
donde todo arderá hasta que llegue el momento de olvidar.

Ella se despide del día,
rezando oraciones,
hablando a un cielo vacío,
donde cree que habita alguien que nunca ha existido.