Confesiones de esas
Me come el agobio,
esto se me hace demasiado familiar.
En un lodazal
he visto un futuro lejano
o quizá
una de esas opciones
que dejé pasar
por vaga,
por lúcida,
por demasiado bueno para mí.
6 de la mañana
el reloj
aún no ha sonado.
Me despierta
un ritmo en mi cabeza,
hoy me he vuelto a colocar.
Te he dejado pasar,
o te has marchado
y no se si hablo de ti
o de ese lado de mi misma
que detesto con ahínco,
que echo en falta,
que me brinda
posibilidades,
variables
poco o nada correctas.
Me gusta así.
Me gusta con desquicio
y sé que el vicio es malo,
pulso acelerado,
mente acelerada,
corazón coraza.
Tengo cariño
a mi armadura,
que es de acero fino,
seda, semillas
de manzano.
Color vinito tinto.
En el mercado del análisis
me lo vendieron todo
a precio inigualable.
Apostamos por lo que apostamos.
No sé si te dejé ir
o fuiste tú
que decidiste dejar,
dejar - me
por aquí un ratito sola.
No hubo abrazo
de despedida
así que doy por echo
que volverás a mí
como vuelven
los buenos amantes,
los vientos del sur.
Me has dejado en el levante,
con borrasca
incluida
por si acaso
me dedico a deshojar
margaritas.
Me obligas a aprehender,
a desechar
cruzando cables
de aquí hasta Gran Capitán
o Santa Teresa.
De la cama a la mesa,
de la mesa al sofá.
Lo tiraría todo
pero no estoy tan tirana,
no estoy tan tirada,
no me doy tanta lástima.
Aprendiendo a querer.
Quererme. Quereros.
Para no odiar.
No quiero
más amor de estanque
clarito y verdoso
con sus lottos morados
que ahora sé
que siempre
podría
habérmelos
fumado,
transformar dolor en humo,
o en sonido,
armonías espaciales
en casa de algún Ruby
con cualquier Sara,
o cualquier Lila,
o cualquier Héctor.
Hoy haré
música con Héctor
si mi desidia
me suelta la mano
y no me tortura
con que esto
y aquello
es en vano
y no me servirá
jamás
a mí ni a nadie.
No sé si te fuiste tu
o te mandé a la mierda yo;
pero por favor
consciencia;
acompáñame esta tarde
y oblígame a soltarle
la mano
a esa zorra
caprichosa
que se empeña
en convencerme
de lo mal
que lo estoy haciendo.
A veces necesito
irme
abrazándote
para no mirar atrás.
Comentarios & Opiniones
Un gusto pesar,saludos cordiales beso.
Si estás estimada. Tus letras me dicen algo inportante.
Y sigue adelante. No, mejor sigamos de frente con las letras y mucho gusto de vivir.
Abrazo poético.
Y hasta nueva obra.
Sentidas Letras Petisa. Saludos.
Comenta & Vota