Veinticuatro

Se detiene un instante
de esos,
que hay pocos en su vida
me mira
en toda su estatura
yo solo sigo viendo
la misma niña con
un poco más de altura.

Ella no se esconde,
su palabra,
puede arruinar tu confianza,
cuando con su acido estilo,
sin ambages,te responde,
puede que tu tristeza,
incremente la balanza,
que el desánimo por tu cabeza ronde,
pero, sus ojos te matan
brindan eterna esperanza.

Ya es toda una mujer,
ya camina sola,
no se sostiene de mi mano,
ni se sienta en mi cuello ,
no necesita mis consejos,
sola enfrenta las trampas,
encara la oscuridad,
ya no le teme a los monstruos,
ha soltado sus velas ,
levantado su propia ancla,
yo voy en tiempo de bolero,
ella va de contradanza.

Cuando esta cansada,
en su cama se recuesta,
no quita el cubrecamas,
ni usa para cubrirse una sábana,
su ropa, por toda,
su habitación, derrama.

A veces se enfada,
cuando intento, sin mucho exito,
poner orden en ese infierno
a mi antigua forma,
pero sus ojos , sus ojos
sinceridad desprenden,
y todavía
un poco,
me ven.
pero solo me dicen,
' papa deja eso para después "
ve y descansa.

En las noches , abro su puerta
con cuidado porque el gato
me acecha,
por una rendija observo
cuando esta dormida,
el cansancio acabó
finalmente con todas sus fuerzas
pero no pide comida,
en su pelo enredado,
solo el misterio crece,
y solo digo para mi
ojalá la vida te compense,
con la felicidad
que merece.

Y esa ingenuidad,
que en su mente crece
se transforme en sinceridad,
la bondad siempre aparece,
no la puede ocultar.

Y como una experta ladrona,
se lleva todo mi corazón,
nada me paga,
va caminando, a su forma,
por su propia vida,
con sus errores
con su razón,
a mi nada me hace daño,
mientras que ella no llore.

Ha desplegado sus alas,
navega con su propia verdad,
nunca se rinde,
no guarda sus deseos bajo llave,
para ella es solo su cumpleaños,
solo un día más, un pequeño detalle.

Se va otro año, ya son 24,
nació con el siglo,
un día con mucho frío,
pero una estrella
alumbra su camino.