Piel morena

Que confortable vista
Aunque casi no te reconozco
Me siento como en casa
Un par de sillas y un sillón viejo en la cochera, para no sentir el frío
Me salen fuerzas hasta en los cabellos
Me vuelvo vulnerable entre el humo
Casi te viertes en mi pecho
No siento el suelo

Ahí estaba,
mirándote como arte
Con tanto anhelo
Y despierto así, como en casa
Muriendo de frío

Queriendo besarte hasta los huesos.