Frente al espejo

poema de Reencuentro

Cuando te levantas
te miras en el espejo
y no ves nada,
nada diferente
a lo que vieras ayer.
Sigue intacto ese deseo
de que te despierten con un beso
cada amanecer,
pero sólo ves tus pechos
en el reflejo
pálido y frío
como la luna.

Cuando te levantas
te miras en el espejo
y nadie te mira,
nadie te habla
y la soledad te abruma
de tan real que es.
Pero que conste:
yo te he ofrecido
mi corazón de hombre
caliente aunque vacío;
sé que no es perfecto
pero
¿quién necesita perfección
cuando se está tan solo
y lo que se necesita es atención?

Mañana
cuando te levantes,
mírate al espejo antes de pintarte,
recuérdeme
y verás que sí,
que sí tengo razón...