Por la ciudad recién mojada

Con un tono más bien verde
puedo escribir y
puedo describir,
puedo contar o cantar
que tengo una flor.
Alimentada por mis lágrimas.
Alimentada por el trabajo de mis manos,
con la fuerza de mis piernas.
Cuando se esconda el sol, florecerá
mi flor.
Cuando paseemos por la ciudad
recién mojada.
Y con mi pluma verde entre los
dedos.