Ángel sin cielo

Un ángel, aunque no baje del cielo,
es igual de considerado.
Y un ángel, aunque no
baje del cielo, es igual de hermoso.
Sólo un ángel,
sea que no venga del cielo,
o no nos importa,
hace olvidar el amor
sin métrica de cuando
hacíamos quince años.
Y un ángel
porque sabe que es verdad,
sueña con la realidad
y duerme, dulce, duerme
haciéndonos caer en
el no recordar lo que
no sabemos apartar.
Ven, oh ángel sin cielo,
y acércate a quien yo
te pido,
acércate.