DE SANGRE HABRA DE SER EL LLANTO MIO

De sangre habrá de ser el llanto mío.
¿Qué otra sustancia ha de tener mi llanto?
Ojos que lloran sangre lloran tanto...
hasta dejar el cuerpo bien vacío.

De lágrimas de agua desconfío.
(Ellas confunden dicha con quebranto)
Sabe mi dios de qué manera y cuanto,
sangran mis ojos como un regadío.

Si es sangre vuestra lágrima no temas.
Dejadla derramar su llanto rojo.
No enjugues ya tu rostro, no hay consuelo,

ni marcas que se quiten con pañuelos,
cuando desangra en lágrimas tus ojos.
Ya es una mancha roja este poema.