LA ADICCIÒN QUE TENÌA A TU CUERPO

poema de ESTALINCANO

POEMA 34
LA ADICCION QUE TENÌA DE TU CUERPO

La sed de ti fue mi perenne agonía
y te volviste inmune hasta mis tediosos celos,
me quebraste el alma con tu partida
y robaste las nubes de mi firmamento.

Me atrapaste con el magnetismo de tu piel
y mi adicción a ti me dejó en la nada;
fuiste una mezcla de dolor y miel
y todo lo que mi boca hoy por orgullo calla.

Cual fugaz nube ocultada por el sol
te volviste la historia que mi cuerpo calla;
la crueldad de mi inocencia
la tristeza de mi mirada.

Tú te enrollas y atacas cual voraz serpiente
tus labios me adulan, tu cuerpo me envuelve,
tus suspiros son enigma para el viejo sapiente
tus ojos son puñales que matan a inocentes.

En tus manos vi fallecer mis estrellas
cuando la luna se apagó con mis devaneos,
hoy el agua borró ya tus huellas
matando la adicción que tenía de tu cuerpo.

ESTALIN CANO
DERECHOS RESERVADOS
MARZO 1997