CRÓNICA DE UNA VIDA

Vestirá de inocencia,
el transgresor que marcó mi juventud.
Los mensajes a mi mente
que transformó mi mañana,
ya no pudo más esconder
la rebeldía.
El mundo codificó la historia.
con palabras elocuentes.
Como heridas colgados en un amuleto,
vistiendo de tristeza mi mirada.

Hoy en día;
los recuerdo son más efímeros,
envueltos en nostalgias.
Quiso la daga del mandinga cortar mi
infancia en pedazos,
ha mostrado sus garras una u otra vez.
Pero no logró su cometido.

Siempre hay una oportunidad
El amor logra cambiar.
Todas las experiencias,
son huellas de superación...

Estuve siempre en guardia,
mis oponentes fueron los rencores;
y las fotografías del pasado,
como pasarela por mi mente.

A pesar de las adversidades,
del contexto de oscuridad;
no fui victima de su plan.