Querubín.

poema de E.I

{ Oh, qué plenitud se encontró,
dentro de lo extraordinario,
y cual quietud se asomó
en la esencia de lo ordinario }

Se divisó arrojado,
un luminiscente querubín,
atrozmente apagado,
por el niño cuya vela omnipresente
devotamente hubo cumplido.

.....

VI-V-MMXV

Comenta & Vota