Del dulce insomnio
poema de Raidbury
La bestia enmudece serena,
su aliento suspira una brisa,
que en sus alas acoge el silencio
que recita esta pluma insomne.
Los astros de guiño estrellado
encandilan a los poetas,
a los penates sibaritas
que reposan incomprendidos.
La mar de oleadas grisáceas
ronronea un clamor maquinal,
un unísono canto lunar
entonado entre sus motores.
Y en la noche de aquestas estancias,
los faroles perrunos brillan
desde tus ojos callejeros,
y el sueño se aupa en cornisas.
Comentarios & Opiniones
Gran placer la lectura, saludos.
Raidbury me gusto pasar por aquí y leer. Saludos
Gracias AcnamalaS y Miguel;me alegra mucho que ambos pasaran a leer mis versos y sus amables palabras.Les envío saludos a los dos.
Bellos e inspirados versos que dibujan un sugerente retrato de una noche de insomnio. Saludos.
Raidbury, ¡cómo dominas el idioma castellano...! Tu poema, como todos, es perfecto. Me encanta leerte amigo. Un fuerte abrazo.
Gracias poeta Margazul,es todo un placer recibir su visita.Saludos.
Le estoy muy agradecido a sus amables palabras,Francisco.Es todo un placer recibir su visita poeta.Un abrazo.